Al momento de reforzar la seguridad de una puerta, elegir el tipo adecuado de cerradura es esencial. Entre las opciones más comunes se encuentran las cerraduras de sobreponer y las cerraduras embutidas. Ambas cumplen la misma función principal: asegurar el acceso a una propiedad. Sin embargo, sus diferencias en instalación, estética, nivel de seguridad y uso recomendado pueden influir significativamente en la decisión final.
A continuación, te explicamos en qué se diferencian y cuándo conviene elegir una sobre la otra.
¿Qué es una cerradura de sobreponer?
Tabla de Contenidos
Este tipo de cerradura se instala directamente sobre la cara interior de la puerta. Queda visible y sobresale del plano de la hoja. Es una opción práctica, especialmente cuando no se quiere modificar la estructura original de la puerta o cuando esta es muy delgada para albergar un mecanismo empotrado.
Se utiliza con frecuencia en puertas de acceso a patios, trasteros o viviendas antiguas, y algunas variantes también son útiles en rejas o portones metálicos.
Ventajas de las cerraduras de sobreponer:
Instalación sencilla.
Requieren menos modificaciones en la puerta.
Visibilidad disuasoria frente a intrusos.
Suelen ser más económicas.
¿Qué es una cerradura embutida?
Las cerraduras embutidas, también llamadas de empotrar, se instalan en el interior de la hoja de la puerta. Quedan ocultas, a excepción del bombín y la manilla o pomo. Son ampliamente utilizadas en puertas principales de viviendas y ofrecen una estética más limpia y elegante.
Si estás valorando instalar o cambiar una cerradura, es clave contar con asesoría profesional para elegir la opción más segura y funcional. Por eso, recomendamos los servicios de Cerrajeros Mataró, quienes pueden orientarte según el tipo de puerta y el nivel de protección que necesitas.
Este tipo de cerradura proporciona un buen nivel de seguridad, especialmente si se combina con sistemas de cierre multipunto o escudos protectores.
Ventajas de las cerraduras embutidas:
Más discretas y estéticamente integradas.
Mayor variedad de modelos y funciones.
Compatibles con puertas modernas o acorazadas.
Pueden combinarse con cerraduras auxiliares.
Seguridad adaptada a cada necesidad
No existe una única solución para todos los casos. Las cerraduras de sobreponer y las embutidas ofrecen ventajas distintas que se adaptan mejor a ciertos tipos de puertas y necesidades. Lo importante es considerar el contexto de uso, el tipo de material y el grado de seguridad deseado.
Contar con una cerradura adecuada puede marcar la diferencia entre una puerta vulnerable y una protegida. Elegir con criterio es el primer paso hacia una vivienda más segura.